Hoy hace tres años de aquel fantástico concierto en la sala Razzmatazz, los últimos días de 1999 de Love of Lesbian. Fue la primera vez (de muchas que vendrían después) que los vi en directo, y claro, eso siempre cambia tu opinión sobre el grupo, para bien o para mal.
Recuerdo todavía como Santi presentó a Amaral, explicando que a veces el éxito viene por algo. Cosa que a ellos le pasaría meses después. Y es que todo lo que les ha pasado en este tiempo no es casualidad, que llenen salas y salas de conciertos, que gusten tanto a jóvenes como a adultos, que consigan en dos horas hacerte participe de una historia “que acabó en un taxi que cogimos juntos y del que nos bajamos por separado”, que te hagan romperte por dentro en cuatro minutos y justo después pases a la felicidad absoluta. Eso señores, es Love of Lesbian.
He tenido la gran suerte de verles en directo muchas veces estos 3 años, en salas grandes donde no hemos podido parar de saltar ni un sólo segundo, en salas pequeñas donde Santi y Julian con su piano y su guitarra han conseguido emocionarnos a todos, en noches eternas con fuegos artificiales, en Apolo llenos de confetis y desenfrenados totalmente,… y aquí seguimos, al pie del cañon.
Gracias señores Love of Lesbian. Por muchas noches eternas más.